Desde hace semanas, el enlace ferroviario entre Zaragoza y el Puerto de Barcelona sufre una drástica disminución, afectando también a Pamplona, Logroño y Burgos. Las obras en el corredor mediterráneo han reducido los trenes en un 70% desde el 1 de octubre, agravado por la mala planificación de Adif y la falta de uso de surcos por parte de Renfe Mercancías. La situación empeora con la cancelación de servicios de COSCO, generando una crisis logística. La acumulación de contenedores y la falta de camiones pone en riesgo la economía regional y nacional. Es urgente actuar.
NOTA DE PRENSA. 16 de octubre de 2024.
Grave Disminución de Servicios Ferroviarios Zaragoza – Puerto de Barcelona.
Desde hace varias semanas, estamos enfrentando una situación alarmante debido a la
drástica reducción de los servicios ferroviarios con el puerto de Barcelona. Esta
problemática afecta no solo a Aragón, sino también a otras terminales interiores
conectadas con el puerto, como Pamplona, Logroño y Burgos.
Las obras en el corredor mediterráneo, especialmente en Roda de Bará, Cataluña, que
comenzaron el 1 de octubre y se extenderán hasta marzo del próximo año, han generado
importantes restricciones. Estas obras son una continuación del corte total de la línea con
Barcelona que sufrimos del 26 de agosto al 12 de septiembre, y de las interrupciones que
venimos soportando desde finales del año pasado.
Durante los primeros ocho meses de 2024, experimentamos retrasos y una reducción del
30% en los servicios ferroviarios, aunque logramos mantener cierta regularidad. Sin
embargo, desde el 1 de octubre, la mala planificación en la asignación de surcos por parte
de Adif ha provocado una caída del 70% en los trenes previstos. Aunque no hay nada oficial,
se nos ha informado extraoficialmente que cerca del 40% de los surcos actualmente
disponibles no se estaban utilizando. Esto sugiere que, además de la mala planificación de
Adif, Renfe Mercancías no está utilizando todos los servicios confirmados, a diferencia de
las empresas ferroviarias privadas que han logrado adaptarse mejor a las restricciones.
La situación es ya alarmante y puede volverse crítica si no se toman medidas inmediatas.
En las terminales intermodales se acumulan contenedores a la espera de trenes que no
llegan, y no hay suficientes camiones para manejar estos volúmenes. La necesidad de
camiones para compensar la falta de servicios ferroviarios está afectando también a los
exportadores e importadores del área de influencia de Barcelona, quienes encuentran
dificultades para encontrar transporte.
Dos días atrás uno de los principales actores en el movimiento ferroviario en Zaragoza,
COSCO, informó que cancelaba todos los servicios ferroviarios entre Barcelona y Zaragoza
hasta nuevo aviso, agravando aún más la situación.
Es urgente que se tomen medidas para resolver esta crisis y evitar un colapso logístico
que afecte gravemente a la economía regional y nacional.
Atentamente,
Junta directiva ATEIA ARAGÓN.
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